viernes, agosto 24, 2007

Todo lo que baja, también tiene que subir…

Esto es para levantar un poco el ánimo, que estos días está de viaje al centro de la tierra.
Muchas veces siento que hago mal las cosas. Que no sirvo.
Siento, cuando me enfrento al teclado, que no escribo ni la mitad de bien de lo que quiero.
Siento que no soy nada especial…
Y no lo soy. Por lo menos no para el mundo.
Pero, hay momentos en los que descubro (me muestran, sería mas justo decir), que algo de idea tengo.
Súbitamente me veo en la posición de resolver situaciones, y lo hago naturalmente.
Si me distancio de mi vida descubro que lo que hago y como lo hago no es ni tan común ni tan sencillo para cualquier otra persona.
Allí es donde me enorgullezco de lo que he llegado a ser.
Y poco a poco entreveo que soy alguien distinta…
Descubro, un poco con sorpresa y otro poco no, que me conozco.
Que sé lo que quiero.
Que sé qué hago, qué voy a hacer en mi vida… y qué no.
Y me gusta.
Me defino, más que nada, por oposición a los demás.
Sé todo lo que no soy y a partir ahí, sé muy bien quién soy.

Hoy sólo intento que ustedes también lo puedan ver…