miércoles, junio 15, 2011

Salvame

…de los tibios, de los que no se jueguen a todo o nada, de los que sientan de a poquito, así se cuidan más.

…de los almohadones en composé, la mesa en línea, las toallas del mismo color y nada de eso por amor.

…de los libros sin subrayar, sin dedicar, de las bibliotecas huérfanas de pasión, armadas casi por reacción.

…de la misma comida siempre, a la misma hora, en el mismo sillón, en la mesa cuadrada o frente al televisor.

…del sexo sin amor con la persona a la que amo, del beso y el abrazo por compromiso, de estar mendigando cariño.

…del hombre que puede decirme que me quiere y luego no mirarme, no escucharme, no reclamarme a su lado.

…de aquellos que no aman a los animales, que no recuerdan el nombre de mis gatos y no conocen mi amor por ellos.

…del asco de pensar su boca en otras bocas, su cuerpo en otros cuerpos.

…del dolor de saber su mente y su corazón en otra.

…de los que no me vean como la última mujer sobre la faz de esta tierra, de los que mueran por tenerme pero no mueran por mi.


Celeste, despertate, curate y salvame…